Congelar Calabacín correctamente

Lo que necesitas para congelar los calabacines:

• Bolsas de Congelación Albal^®
• Tabla de cortar
• Cuchillo
• Pinza de conservación de comida
• Un poco de sal (depende de la cantidad)
• Por supuesto, calabacines.

Calabacines congelados – paso a paso:

1. Reserva los calabacines más pequeños para la congelación.

Los calabacines más pequeños tienen menos agua y, por lo tanto, son más aptos para la congelación, utiliza los más grandes para el consumo próximo. Seguirán más crujientes y se conservarán perfectamente, después de congelarse.

2. Lava y corta los calabacines.

Lava y seca los calabacines y corta las puntas. Luego trocea el calabacín como más te guste, en cubo o tiras. Los zoodles, es decir, los calabacines en forma de espaguetis no son, por desgracia, aptos para la congelación. 

3. Sala los calabacines.

Coloca el calabacín troceado en un colador. Espolvorea una pizca de sal sobre ellos. Espera unos 15 minutos y retira el agua con un trapo de cocina. La sal quita el agua de los calabacines, dejándolos así más crujientes. 

4. Congela los calabacines.

Vierte los calabacines preparados en una Bolsas de Congelación Albal^®,saca el aire y cierra la bolsa con el cierre que traen las bolsas. ¡Ya están listos para congelar! 

5. Vida útil de los calabacines en el congelador.

Los calabacines congelados pueden ser conservados durante 8 meses. Para asegurarte de que los calabacines cortados en dados o rodajas no se te olvidan al fondo del congelador, usa la aplicación FoodSaver de Albal^®. Ésta te recordará con tiempo la fecha máxima de consumo preferente para descongelar la verdura y cocinarla. Y hablando de descongelar: puedes añadir el calabacín congelado directamente en la olla o en la sartén para cocinarlo, freírlo o hervirlo.